Mi motivación más grande para viajar es la comida. Uno de mis objetivos cuando visito cualquier lugar es conocer su gastronomía: sus ingredientes, sus platos típicos, sus restaurantes, su forma de comer… todo.
Es difícil llegar a conocer todo esto simplemente yendo a un pais. Si no conoces a algún local, es muy fácil perderse en toda la oferta turística, que suele estar muy alejada de la cultural gastronómica más tradicional.
Para no ir a ciegas, empecé a leer novela gastronómica. La verdad, no sé si es un género. Me refiero a novelas, de cualquier tipo, dónde la comida tiene un papel especial y es tratada con especial atención y detalle.
En 2019, antes de viajar a Japón, leí este libro: «El cielo es azul, la tierra blanca» de la escritora japonesa Hiromi Kawakami.

Aunque se trata de una novela romática, que no es un género que me guste especialmente, me cautivó. No es una novela cursi, ni la típica historia para adolescentes.
Los dos personajes principales, un profesor jubilado y una antigua alumna, se encuentran por casualidad. Empiezan a salir juntos, a ir a bares y restaurantes. Paso a paso, estos dos lobos solitarios, crean una conexión más allá de lo físico, forjada lentamente, un amor adulto.
Es durante los encuentros de la pareja en los restaurantes donde esta novela me conquistó. Se empiezan a describir platos, bebidas, y su modo de servirlos. Todo con mucho mimo y cuidado. En un momento de la historia, Tsukiko, la protagonista, sirve una cerveza al señor Harutsuna, el protagonista. La escena se convierte en un momento tenso. El señor Harutsuna es muy maníatico y le gusta su cerveza servida de una forma muy concreta. ¡No pude evitar reírme!
Si te gusta la cultura japonesa, la gastronomía o simplemente las novelas románticas, te recomiendo este libro. ¡Lo vas a disfrutar!
Por cierto, este soy yo en uno de los muchos restaurantes que visité durante mi viaje: